Hace dos años y medio, cuando empecé a correr, poder acabar una maratón me parecía un sueño inalcanzable. Había oído hablar mucho sobre la mítica distancia, casi siempre en términos aparentemente contradictorios: sufrimiento, gloria, sobreesfuerzo, superación personal... Pero una vez el running se 'introdujo' en mi vida, sabía que, tarde o temprano, llegaría el día de enfrentarse al reto de Filípides. Y ayer, 22 de abril de 2012, cumplí aquel sueño.


Desde enero, he corrido dos medias (con sendas MMP en Getafe y en Madrid: 1h35') y he mejorado mi marca en 10km (41'48"). Los entrenamientos iban bien, la mejora se notaba, sobre todo al poder combinarlos con algo de natación y salidas en bicicleta los fines de semana. Llegué a hacer algún día 28km entrenando running y más de 100km en bici. Sin embargo, en las últimas tres semanas, entre el cansancio acumulado, algún que otro dolor y otras cuestiones laborales, no estaba saliendo como debía y reduje considerablemente los días de entrenos. No sé si pudo haber influido esto en el resultado final, pero psicológicamente estaba preocupado por cómo iba a responder en los kilómetros finales de la maratón... Con todo, ayer me presenté en una abarrotadísima línea de salida, situada en pleno Paseo de Recoletos. El ambiente, una mezcla de nervios e ilusiones, era digno de ser vivido. Con tiempo, y después de calentar un poco, me coloco en mi sitio y me pongo de objetivo en mi inseparable Garmin, un ritmo medio de 5'10" (pensaba que, si conseguía hacer entre 3h30' y 3h40', sería todo un éxito, tratándose de mi primera maratón). Pistoletazo de salida y a correr...

Los primeros kilómetros, en constante subida, son de disfrute. Los puentes que cruzan el Paseo de la Castellana están llenos hasta la bandera. El ambiente es increíble, la gente grita y nos damos ánimos entre todos. Paralelamente a la maratón, se disputan los "10km de Madrid", si bien en el km. 3, a la altura del Bernabéu, los caminos se dividen y los participantes del 10.000 nos despiden con aplausos. Hasta el km. 6, Plaza de Castilla, hay una ligera pendiente ascendente. Me cuesta no correr más deprisa, acostumbrado a pruebas de menor distancia, pero sé que esto va a ser duro y me voy frenando. Decido ir a 5'/km y no mirar demasiado el reloj. Bebo un poco de agua en el primer avituallamiento (uno de los consejos más sabios que he aprendido durante la preparación, "beber aunque no se tenga sed") y sigo con la misma constancia.


Al llegar al km. 10, y tras varios "sube-bajas", el Garmin sigue señalando un ritmo medio de 5'02". Todo perfecto. Disfruto de la carrera, del ambiente, de los aplausos del público (impresionante la subida entre Nuevos Ministerios y Cuatro Caminos) y me noto muy bien de energías... Sin querer, me vengo un poco arriba (si bien es cierto que ayudaba que, hasta el km. 23, la pendiente era bastante favorable) y marco algún km. por debajo del ritmo establecido. Llegamos al km. 15, vuelvo a beber agua (bebí en todos los avituallamientos, y menos mal) y todo sigue igual. Mención especial a cómo estaba todo el camino desde Fuencarral hasta Sol. Se me pone la piel de gallina cada vez que recuerdo la entrada a la Gran Vía... Imposible no disfrutar del momento.


Así, y hasta la media maratón, en la calle Ferraz, todo sigue igual. Los aductores empiezan a darme avisos (no es la primera vez desde aquel intento fallido de Transvulcania en 20), pero nada que me preocupe en exceso. Sin embargo, pasada la media, una bajada hasta el Parque del Oeste (que en principio debería ser favorable), se convierte en un pequeño punto de inflexión. Algo me pasa: no voy mal, pero desde luego no voy como antes. El ritmo se va ligeramente hasta 5'10"-5'15" y sé que no volveré a ir como antes.

Llegados al km. 25, me encuentro con Naira y con mi madre, que al verme se vienen arriba (bendita compañía, no sé si hubiera llegado sin ellas). El chute de adrenalina hace que vuelva a sentirme bien, pero sólo durante un par de minutos. Un mero espejismo. La Casa de Campo, como ya había leído en más de una ocasión, pone a cada uno en su sitio. Y a mí me puso en el del hundimiento. Un afortunadamente breve pero intenso dolor en la rodilla derecha me avisaba de que aquello se estaba poniendo feo. Las pendientes no ayudaban, pero aún así, sabía que cada vez iba a ir a peor. Aguantaba como podía en 5'45", pero sabiendo que cada km. comenzaba a ser un suplicio. Llego al km. 32, ya saliendo del "pulmón de Madrid", y vuelvo a ver a las chicas. Me animo, pero estoy roto. Pulmonarmente voy bien, y el pulsómetro me da 170pm, así que no me preocupo en ese sentido. Pero me quedan aún 10km, una distancia que he hecho decenas de veces, pero que hoy se me antojan eternas...
                                           

Desde el km. 32 hasta el 37, ya sólo iba con la cabeza. Las piernas, sobre todo los aductores, me dolían constantemente. Y además, el perfil no acompañaba. Los últimos 10km de la maratón de Madrid son casi en subida permanente, con algunas pendientes criminales (sobre todo en el estado en el que uno llega a ese punto). Aún así, conseguí a duras penas mantenerme en unos lamentables 6'15"/km, pero forzando mucho la maquinaria. Al llegar a la glorieta de Pirámides, vuelvo a ver a las chicas, pero ya no puedo ni con mi alma. Llevo mucho tiempo viendo a gente caminar, y aunque me digo a mí mismo que no me pare, cada vez lo veo más inevitable. El último km. lo he hecho en 7' (!!!) y cada vez voy peor. Siento incluso que si sigo corriendo, voy a vomitar. La gente anima, sé que no quedan sino 4km. hasta el Retiro, pero aún queda mucha pendiente y siento que no puedo más.


Finalmente, y por mucho que me doliera, me pongo a andar a la altura del Museo Reina Sofía. Tengo que caminar, aunque sea descansar unos metros. Lo hago y me sienta bien. Demasiado bien. Lo suficiente como para que la mera idea de volver a correr me parezca estúpida. Miro el Garmin y veo que aún estoy a tiempo de bajar de 4h. Corro un poco. Pero por mucho que lo intente, pienso que no estoy para seguir corriendo. No quería arriesgar, no tenía necesidad. Así que ando rápido. Me siento fatal andando: no quería llegar a este punto, pero es que realmente no podía más...De ahí hasta la entrada al Retiro (escasos 2km), alterno correr (o algo que se le parece) y andar. Miro el reloj y creo que aún puedo bajar de 4 horas. He perdido toda una minutada en los últimos 5km, pero ya me da igual. Sólo quiero llegar y acabar con esto. Entro al parque, como he hecho tantas veces, pero esta vez, aún a pesar de los gritos del público, tengo que andar un poco más. Me duele todo, hasta la espalda está agarrotada, pero ya veo a lo lejos la meta. Saco fuerzas de donde hace tiempo que no hay y troto hasta la última recta. Durante esos metros finales pienso en mí, en la carrera, en correr, en Naira, en la vida y en lo feliz que me siento por poder terminar con este martirio. Alzo los brazos al cielo y cruzo en 4h01'45".Podrás leer mucho sobre maratones, pero nada podrá describir lo que uno experimenta cuando uno está en la recta de llegada de su primera maratón. Como dijo el gran Zatopek: "if you want to do something, run 100 meters. If you want to experience something, run a marathon".

PD. A los 30 minutos de haber cruzado la meta, ya sabía que el año que viene volvería a enfrentarme a la maratón...

35º Rock 'n' Roll Madrid 2012

12:30 domingo, 22 de abril de 2012



El Transbrother Albert, finisher del Maratón de Madrid. ¡Enhorabuena!  

Fotos:
- José Herrero
- Txamo 
- Foto runners
- Kataverno I - Kataverno II - Kataverno III
- Sebastián Navarrete 


Miguel Caballero se ha adjudicado esta mañana la X Carrera por Montaña de Cuenca, primera prueba puntuable para la Copa de España. Caballero ha sido el más rápido en completar un recorrido de casi 32 kilómetros con un desnivel positivo de 1.950 metros y un coeficiente de dificultad de 62. En segundo lugar ha entrado Luis Alberto Hernado, mientras tercero ha sido el atleta balear Tofol Castañer. En cuanto a los canarios, el mejor fue el gomero Cristofer Clemente (21º), Paquito Trecus llegó en el puesto 106.
 
Fuente:  http://eldiadigital.es

Fotos:
- Mon Ferrer
- Miguel Ángel Glez 
- Sergio Palomero
- Club de Montaña Ribeira Sacra 
- Fidel Olmo  
- Javier Panadero
- Javier Panadero II
- Arthur Black 
- Alejandro Simón  
- Iñaki Beneit

Crónica:
- Miguel Caballero (ganador)
- José Javier Fdez Trecus

Vídeo:
Ocisport

Track

Martiánez Trail 2012

18:30 domingo, 8 de abril de 2012


Podio Masculino:
1º  Juan David Gallardo
2º  Manuel Méndez Palomares
3º  Justin Baldwin (Transbrothers)


Fotos:

ULTRABIKE LA PALMA

23:59 sábado, 7 de abril de 2012


XVI Medio Maratón Las Galletas 2012

14:00 domingo, 1 de abril de 2012

CLASIFICACIÓN

Clasificación 10,8 km
Transbrother participante: Justin 1h29m01s, puesto 83, 28 en Senior M

Fotos:
- Tripto 
- Jorge Sanchis 
- Running Tenerife 
- José Manuel Rguez 

CLASIFICACIÓN

Transbrother participante: Albert 1h35:09